(y la revisión del Plan de Ordenación Territorial de Trujillo Alto)
Nelly Díaz Adorno, Legisladora Municipal de Trujillo Alto
por el Movimiento Victoria Ciudadana
Las sacudidas que estremecen la tierra cuando detonan los explosivos en la Cantera Carraízo, la nube de polvo particulado que se levanta y que el viento dispersa sobre la comunidad de Carraízo es lo más cercano a una zona de guerra en un país que nunca ha vivido una. Primero se escucha el ruido de las máquinas, luego la sirena que avisa la explosión; entonces se escucha la explosión que mueve los cimientos y las paredes de las casas como si fuera un terremoto. Al rato llega el maldito polvo con tierra, piedra y químicos que se respira sin remedio y que cubre las paredes y los muebles.
Contarlo, leerlo o escucharlo no es vivirlo. Para comprender los efectos sobre la salud física y emocional que provoca en los vecinos de Carraízo la explotación de la corteza terrestre que ha estado llevando a cabo la Cantera por alrededor de 75 años, hay que vivirlo en carne propia.

El Plan de Ordenación Territorial (POT) vigente en Trujillo Alto fue aprobado en 2010 y revisado en 2012. Tras haber expirado su término de vigencia, la Oficina de Planificación del Municipio emprendió una revisión integral en colaboración con la Junta de Planificación. El 18 de marzo de 2025 se anunciaron las primeras vistas públicas del borrador. El director de la Oficina de Planificación, Sr. Luis Rivera Camacho, informó que se corrigió la calificación de las parcelas de la Cantera de I-P (Industria Pesada) a I-E (Industria Especializada).
Los vecinos del Barrio Carraízo denunciaron los daños a la salud física causados por las explosiones, el polvo y el particulado, así como los daños estructurales a sus casas. Denunciaron también el daño emocional que causa vivir en un ambiente tan hostil.
La principal preocupación expresada por los vecinos fue la posible expansión de la Cantera hacia tres franjas de terreno adquiridas recientemente por sus dueños, lo que agravaría el ambiente hostil que afecta la calidad de vida de las comunidades aledañas a la Cantera.

El 15 de mayo de 2025 se continuaron las vistas públicas. El planificador Rivera Camacho anunció el cambio de clasificación de las franjas adquiridas por la Cantera de I-P a C-R (Conservación de Recursos). El anuncio fue aplaudido por los vecinos y protestado por los dueños de la Cantera.
El 18 de septiembre de 2025 el POT recibió la aprobación unánime de la Legislatura Municipal. Como legisladora Municipal por el MVC, estuve pendiente del proceso, asistí a las vistas públicas, conversé con ciudadanos y recibí orientación de expertos como el Dr. Neftalí García. La única comunidad que levantó bandera fue Carraízo por su cercanía con la Cantera. Le expresé a mis colegas legisladores la importancia de mantenernos vigilantes de que la Cantera esté en cumplimiento de la reglamentación que le aplique, e inclusive, que tome medidas para aminorar los daños a la salud de la gente y sus propiedades; que el Municipio ejerza su poder fiscalizador sobre la Cantera.
Una vez aprobado por la Legislatura, el POT fue referido a la Junta de Planificación. Según revelado en la prensa, el presidente de la Junta, Sr. Héctor Morales Martínez, ha expresado reservas sobre el cambio de clasificación de los tres lotes, alegando que podría representar una expropiación a la inversa.
La periodista Génesis Ibarra Vázquez entrevistó al presidente de la Cantera, Alfonso Díaz, quien aseguró que no planean expandir la operación, sino mantener los terrenos como zonas de amortiguamiento. El propósito del municipio al clasificar los terrenos como distritos de conservación fue precisamente, aumentar la zona de amortiguamiento entre la Cantera y la comunidad.
El municipio ha establecido que el POT es una herramienta clave para garantizar el desarrollo ordenado, la protección del medio ambiente y el fortalecimiento de la economía. Por eso voté a favor de la revisión integral del POT, porque fue trabajado con cuidado y visión.
Mi reconocimiento a los residentes de Carraízo por alzar su voz y exigir al Municipio medidas que alivien la tortura de vivir cerca de una cantera; mi agradecimiento al Municipio por escuchar a su gente.
Nos sorprende que el presidente de la Junta tenga reservas. ¿A nombre de quién se queja? Ese pelo que le hemos sacado al lobo ampliará sustancialmente la zona de amortiguamiento y garantizará que la Cantera no amplíe su huella por lo menos por los próximos ocho años.
Exigimos que el presidente de la Junta de Planificación cumpla con la política pública establecida en el Artículo VI, Sección 19, de la Constitución de Puerto Rico: “será política pública del Estado Libre Asociado la más eficaz conservación de sus recursos naturales… para el beneficio general de la comunidad.” Exigimos que el presidente de la Junta le imparta su visto bueno al POT de Trujillo Alto que fue trabajado con la colaboración de personal de su agencia.